Para mi no fue un fin de semana normal, no pudo serlo para ti tampoco.
Un concierto masivo que involucró al mundo entero organizado para salvar a la Tierra del problema del Calentamiento Global. Después Chichén Itzá se convirtió en una de las nuevas 7 maravillas. El domingo en la mañana un tipo ganó por quinta vez consecutiva el Torneo más importante de Tennis (Tenis) igualando al gran Bjorn Borg. Entrada la tarde unos muchachos vestidos de verde aplastaron a la selección de Paraguay con un escandaloso 6-0 para alcanzar la semifinal de la Copa América. Minutos más tarde, unos chavos vestidos del mismo color vencieron con los suplentes a Nueva Zelanda para cerrar con récord perfecto la fase de grupos del Mundial Sub-20. Todo ésto en tan solo dos días. No puede ser normal.
Por sobre todas las cosas éste fin de semana fue de alegría, alegría de haber nacido donde nací, alegría de ser un orgulloso mexicano. Es por eso que al escribir estas líneas estoy utilizando esa playera verde, la que espero no quitarme en mucho tiempo.
Chichén Itzá logró el sábado lo que todos nosotros sabíamos, confirmó lo que es desde el momento en que se terminó de construir "El Castillo" y que se renueva cada que Kukulcán desciende por él. Una Maravilla.
Todos sabemos lo que es Roger Federer aún si Nadal lo vencía. Pero la máquina suiza se comportó a la altura y soportó la presión del español, de la catedral del Tenis y de que el mismo Borg estuviera presente. Una Maravilla.
Lo que no sabíamos era que la selección vencería tan fácilmente a Paraguay, no sabíamos que se quedarían con uno menos desde el minuto 2 pero mucho menos nos imaginábamos que los golearíamos de semejante forma. Tanto, que dudo que muchos hayan gritado el sexto gol, probablemente aplaudiste y hasta incluso sentiste lástima de los paraguayos. Yo si.
De los muchachos sub-20 no sabíamos que esperar, su magistral victoria contra los portugueses les daba la posibilidad de encarar el partido de hoy con sus suplentes. Pero estos muchachos están hechos de otra madera, de una nueva madera que viene a cambiar (esperemos para siempre) la mentalidad de todos nosotros, porque su convencimiento de ganar no solo inspira en lo deportivo y eso hay que agradecérselos.
El miércoles y el jueves serán días más importantes y de más trascendencia pero nada nos impide creer que venceremos a Argentina y ganaremos la final, nada nos impide creer que "los chavos" volverán a ser campeones del mundo y que admiraremos a Nery y a Rafa como el equinoccio de Kukulcán, que admiraremos a Giovanni y Vela como a unos reyes igual que Federer y entonces... ellos también serán unas maravillas. Nuestras maravillas.
